En el sector profesional estas láminas son las más utilizadas para la impermeabilización de terrazas de viviendas, cubiertas de naves industriales, edificios, etc. Su instalación suele ser compleja, ya que se instala mediante calor (con un soplete), y suele ser realizada únicamente por aplicadores profesionales especializados.
Como no todos podemos permitirnos la visita de un profesional, y habiéndose comprobado la calidad de este tipo de impermeabilización, muchas grandes superficies de bricolaje han decidido comercializar una variante de este tipo de láminas profesionales que sí han sido diseñadas para poder ser instaladas por un particular.
Las principales diferencias entre ambos tipos de láminas son:
- Aplicación autoadhesiva. Mientras que las láminas profesionales necesitan calor para ser adheridas, estas tienen una cara con adhesivo que evita el uso del soplete facilitándonos el trabajo.
- Formato menor. Mientras que los profesionales instalan láminas de 10-12 metros de largo, estas láminas suelen ser de 6 metros para que su instalación, manipulación y transporte es más sencilla.
- Atractivo acabado. Estas láminas para bricolaje suelen tener acabados en gránulos minerales de color o incluso metalizados, por lo que nuestra terraza o tejado tendrá un mejor estilo.
A continuación os voy a dar unas indicaciones generales de cómo hay que instalar estas láminas si tenemos un problema de humedad. Con un poco de “maña” y paciencia conseguiremos un buen resultado.
Materiales a utilizar (las láminas y la imprimación las podréis conseguir en cualquier gran superficie de bricolaje, y las herramientas en cualquier tienda):
- Lámina impermeabilizante. El número de láminas que será necesario dependerá de la superficie que queramos cubrir. Las láminas suelen ser de 6 metros de largo y 1 metro de ancho. Suelen venir en cajas de cartón para mantener todas las propiedades.
- Una imprimación para preparar la superficie previamente a la instalación de la lámina.
- Un sellador o adhesivo para los solapes.
- Una brocha para la imprimación.
- Un cúter para cortar el plástico antiadherente de la lámina.
- Un rodillo para una vez aplicada la lámina hacer presión para garantizar la adherencia.
Pasos a seguir:
1. Lo primero es limpiar por encima la superficie de polvo, manchas de grasa o cualquier elemento que pueda dificultar la adherencia.
2. Después deberemos aplicar una ligera capa de la imprimación, y dejar secar un par de horas. Con este producto se mejorará la adherencia del producto. Se suelen aplicar aproximadamente 200 gramos por metro cuadrado. Al igual que es bueno echar este producto, es bueno no pasarse, ya que si hay en exceso puede dificultar la adherencia al no secarse correctamente.
3. Para alinear la primera lámina, hay que desenrollarla por completo desde un borde de la parte inferior (sin quitar el plástico antiadherente que cubre el adhesivo de la lámina). Importante: las láminas se instalan de abajo a arriba para evitar filtraciones en los solapes.
4. Una vez alineada, hay que enrollar de nuevo la lámina hasta la mitad, y con mucho cuidado para no cortar la propia lámina, cortaremos el plástico antiadherente.
5. Luego se vuelve a desenrollar al mismo tiempo que quitamos el plástico para que se pegue la lámina. Siempre es más fácil empezar a pegar desde la mitad en ambos sentidos que desde un extremo. De esta forma evitamos que se desvíe horizontalmente mientras la pegamos.
6. Hacemos lo mismo con los todos los rollos. Siempre de abajo a arriba. Y hay que solaparlos entre sí (longitudinalmente) casi 10 centímetros para que no haya filtraciones. Veréis que estas láminas tienen una franja sin gránulo para facilitar el solape.
7. Luego se recomienda pasar un rodillo apretando por las zonas en las que se unen dos láminas para que no se despeguen posteriormente.
8. En caso de que la superficie necesite varias láminas a lo largo (por ejemplo un tejado o una terraza) en los solapes transversales se recomienda rascar un poco el gránulo mineral para que la siguiente lámina se pegue sobre el asfalto y no sobre el gránulo. Además, hay que aplicar de nuevo un producto sellador.
9. Siempre que la lámina acabe en un muro, hay que sobreponer la lámina con el muro o pared para evitar filtraciones. Y de la misma forma que antes, aplicar sellador en la junta entre la lámina y el muro.
Hay que destacar que estas láminas no se pueden pisar, ya acabaríamos perforándolas, por lo que habría filtraciones.
Para acabar os adjunto unas fotos de instalación que me han enviado.
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